Editorial Radio Nonguén-. La Despenalización del Aborto por tres causales es una larga lucha de las mujeres siendo apoyadas por el grueso de la ciudadanía chilena, el tema es complejo dado que, involucra aspectos culturales, de derechos humanos, género, médicos, religiosos, filosóficos, morales, sin embargo, es una expresión del derecho a la libertad individual conquistada luego de luchas de décadas en nuestro país, y que hoy se encuentra bajo amenaza por una mirada integrista de un grupo de políticos y sus adláteres (en su mayoría hombres) apegados a ideas ligadas a tradición, familia, capital y fe.
La despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo fue legalizada en nuestro país el año 2017, siendo aceptada bajo tres causales, considerando como tope para realizarla 12 semanas de gestación:
– Peligro de vida de la madre
– Violación
– Inviabilidad fetal
La propuesta legal fue impulsada por el segundo mandato de la Presidenta Bachelet el año 2015 como respuesta a los múltiples requerimientos de orden ciudadano que exigían legislar al respecto, respetando con ello la necesidad de avanzar en una mirada abierta, sin sesgos de fe y de respeto hacia la decisión de la mujer respecto de ella misma, algo necesario en sociedades que impulsan la libertad individual como paradigma societario, sin embargo, enfrentó la oposición de la derecha y grupos ligados a la fe quienes opusieron toda clase de argumentos y presentaron un futuro apocalíptico para nuestra sociedad, (cosa que cinco años después podemos constatar que no ocurrió).
Pese a sus esfuerzos fue aprobada por la Cámara de Diputados en marzo de 2016, el Senado la aprueba en julio de 2017 con cambios respecto a lo ingresado, por lo que debe volver a la Cámara de Diputados en tercer trámite para aprobación, la propuesta es rechazada, por lo que ingresa a comisión mixta, quién la informa y es aprobada por el Congreso Pleno en agosto de 2017.
Ante la aprobación por parte del Congreso, los opositores recurren al Tribunal Constitucional con dos requerimientos de inconstitucionalidad, los que luego de ser vistos, y oídos los alegatos de las partes son rechazados en general por 6 votos a 4. Solo acogen de ellos aquello relativo a la objeción de conciencia, declarando inconstitucional lo aprobado respecto de este tema en particular, e incluso ampliando el concepto de objeción de conciencia a instituciones.
Finalmente, la ley es promulgada el 23 de septiembre de 2017. Hoy esta ley se encuentra bajo ataque, los grupos integristas han considerado que la ley es un ícono de la libertad de conciencia humana, algo inaceptable en la medida que dichas conciencias no respondan a sus dogmas político, económicos y de fe, por lo que debe ser derogada.
El diputado Republicano Cristóbal Urruticoechea ha presentado un proyecto de ley para derogar la despenalización del aborto en tres causales, además de aumentar las penas para aquellas mujeres que se lo hagan, el personal de salud que participe del procedimiento e incluso a quienes difundan o promocionen servicios o productos que sirvan como medios para realizar abortos.
¿A quién apunta esta propuesta de ley?. Sin lugar a dudas a restringir las libertades sociales e imponer una visión de desarrollo societario aportado por un pequeño pero poderoso grupo de chilenos, quienes en una
visión mesiánica de corte medioeval e integrista, rayando en lo fascista, pretenden imponer su concepción de lo que es el derecho de decisión personal solo si se encuentra ligado a la tradición que dicen respetar y a lo que ellos entienden como trato social, con el objeto de cumplir su objetivo no trepidan en atacar destempladamente a quienes no piensan como ellos y ofender a las mujeres, incluso a aquellas afectadas por un acto deleznable como es la violación. En su intento ni siquiera piensan en la necesidad de respetar el avance que adicionalmente significó la ley que quieren derogar respecto de salud sexual y reproductiva.
Quienes integramos radio Nonguén denunciamos públicamente este intento por coartar libertades conquistadas en largas luchas del pueblo chileno, como es la despenalización del aborto por tres causales.
Nos oponemos con fuerza al intento moralizador, integrista y dogmático de la ultraderecha chilena, y proclamamos la libertad de conciencia como eje de convivencia social, herramienta clave para empoderar el respeto por los derechos humanos y base de una sociedad que avanza hacia una vida más digna, justa e
igualitaria.
Equipo Editorial Radio Nonguén.